Decálogo del buscavidas

 
10 propósitos para
Año Nuevo

Creo en el Karma. Estoy convencida en el equilibrio de las cosas y sé que, todo lo que haga, me será devuelto con creces: lo bueno y lo malo. El que la hace, la paga más tarde o más temprano y no en otra vida, sino en esta misma.

Este decálogo no es la solución a este mundo injusto y egocentrista, son sólo mis propósitos para este Año Nuevo que en breve comenzará. Una manera de hacer mi mundo un poquito mejor.

1.- SONRISA: Cada día, al levantarme, me obligaré a sonreír ante el espejo. Este simple gesto, hará que empecemos el día de mejor humor. Hagas lo que hagas... ¡Hazlo sonriendo! Seguro que notas el cambio, en ti y en los demás. Este punto es muy importante los lunes por la mañana, cuando te dirijas a trabajar; ya sabemos lo mal que sienta pero lo agradecerás y te lo agradecerán, además de empezar la semana con buen pie.

Puedes ver el video en nuestro canal de YouTube...

2.- AMABILIDAD: Los buenos modales no están reñidos con las modernidades. Pedir las cosas "Por favor" y dar las "Gracias" al conseguirlas, no nos cuesta nada. La señora que limpia tu oficina, el camarero que te sirve la comida, el conductor del autobús que te lleva a trabajar, el policía que te indica el camino a tu destino, los dependientes de las tiendas donde compras, los teleoperadores que atienden tus llamadas... Es mucha la gente que trabaja al servicio de los demás y, no debemos olvidar, que son muchas las personas diarias a la que atienden. Ser amable, agradecido y paciente, es lo mínimo que podemos hacer por recompensar su dedicación.

3.- RESPETO: No importa sexo, edad, religión, ideología política, tendencia sexual, raza, procedencia, posición social o profesión; el respeto a los demás es algo que se está perdiendo. La única manera de conseguir un mundo en igualdad de derechos para todos, es comportarnos respetuosamente con el resto del mundo e inculcarles lo mismo a nuestros hijos. El respeto a los mayores, a los profesores y figuras de autoridad, al resto de sus compañeros y, sobre todo, a sus propios padres. Si queremos que los demás nos respeten, debemos empezar por respetarnos a nosotros mismos y al resto de las personas por añadidura.

4.- INFANCIA: Con el cambio de los tiempos, padres y madres trabajan fuera de casa y los niños se están criando con los abuelos o en guarderías. Si bien es muy importante trabajar para conseguir sacar una familia adelante, el amor debe ser la base de nuestra familia. Busca todos los días un rato para estar con tus hijos; ayudarles a hacer los deberes, hablar sobre lo ocurrido en el día, jugar con ellos o leerles antes de dormir son actividades que no nos llevarán mucho tiempo pero asegurarán la confianza de nuestros hijos y les animará a compartir sus inquietudes contigo.

5.- SOLIDARIDAD: Ayudar a los necesitados debería ser un acto reflejo. A nosotros nos gustaría recibir ayuda cuando tenemos problemas. De igual modo, debemos ayudar a los demás. Al que pasa hambre, al que necesita trabajo, al que se ha perdido o al que necesita que le escuchen. El que da lo que tiene, no está obligado a dar nada más. Aporta tu granito de arena.

6.- CONCIENCIA ECOLÓGICA: Sin hablar con expertos en el tema, es obvio que la importancia de nuestras necesidades ha superado, hace tiempo, la importancia de las necesidades de nuestro entorno. El Sr. Smith en Matrix lo resumía muy bien:

"Todos los mamíferos de este planeta desarrollan instintivamente un lógico equilibrio con el hábitat natural que les rodea. Pero los humanos no lo hacen. Se trasladan a una zona y se multiplican y siguen multiplicándose hasta que todos los recursos naturales se agotan. Así que el único modo de sobrevivir es extendiéndose hasta otra zona. Existe otro organismo en este planeta que sigue el mismo patrón. ¿Sabe cuál es? Un virus."

Sólo en basura, cada año producimos, en todo el mundo, dos billones de toneladas de residuos sólidos. La energía y consumibles que gastamos en exceso, la polución que arrojamos a la atmósfera diariamente, los residuos nucleares que "escondemos" bajo tierra o en las profundidades marinas, las matanzas indiscriminadas de animales...

Es momento de tomar conciencia y, paso a paso, ir cambiando nuestros hábitos y asumiendo que debemos cuidar el planeta como nuestra propia casa. Una vez más, el ejemplo es fundamental: si nosotros lo hacemos en casa como un hábito, se lo inculcamos a nuestros hijos como algo natural. Seguro que nuestros nietos nos lo agradecerán.

7.- MAYORES: En las tradiciones ancestrales, el respeto a los mayores era una de las primeras enseñanzas a los más pequeños. Los consejos de sabios que regían las tribus, no eran otros que los más ancianos del lugar. Más sabe el diablo por viejo, que por diablo. Toda persona con más edad que nosotros mismos se merece mínimo un respeto, y esto es algo que se está perdiendo en la niñez actual. Debemos inculcar a nuestros hijos el respeto hacia nuestros mayores y, por supuesto, darles ejemplo con nuestro comportamiento.

8.- EMPATÍA: Es un ejercicio que deberíamos practicar diariamente. En este mundo tan centrado en nosotros mismos, es necesario saber ponerse en el lugar del otro para poder comprenderle. Con un poco de empatía, habría menos peleas y discusiones y todo iría mucho mejor.

9.- JUSTICIA: No exijamos a los demás lo que nosotros mismos no somos capaces de hacer. La justicia es un camino de dos sentidos, si queremos que el mundo sea justo con nosotros, nosotros debemos ser justos con el mundo.

10.- LECTURA: Leer es cultura. No solo fomenta nuestra imaginación, también mejora nuestro lenguaje, nos amplia vocabulario y, como cualquier otro hobby, nos permite pasar momentos inolvidables.

Intenta leer un par de libros este año y, entre los regalos que tengas previstos hacer, incluye algún libro. Regala cultura.

¿Quieres compartir el decálogo con tus amistades? Envía este fichero por correo-e